miércoles, 30 de mayo de 2012

Don Miguelito, el Biendicho

Aunque este Documento correspondería, según la cadencia de publicaciones, en la primera semana de Junio, necesidades de programación nos obligan a adelantarlo para, de esta forma, la próxima semana hacer públicos los actos a desarrollar en el 2º Semestre, una vez aprobados por la Asamblea.

 Yunque de herrero

En cuanto al Documento que hoy presentamos, como podrán leer al acceder a él, se trata del apunte de una escena  del sainete alizonenco <El Tintero de la Ayala>.
El escrito, según los autores, tiene dedicatoria. Pero, no era necesario tal esfuerzo. Para quienes ya rondaron los sesenta, los personajes de este apunte así como los de sus diferentes sainetes en alizonenco lenguaje no resulta complicado imaginarles recorriendo calles, caminos, bancales y campiñas de nuestro solar patrio.

Esquilón del bestiar

Con todo, como las obras trascienden el instante y la causa de su nacimiento, éste apunte, como el resto de las diferentes obras de nuestros Pepe Ciges y Emilio Granero, adquieren otra dimensión que es la causa por la que los redactores del blog se sienten honrados al colocarlas en nuestra biblioteca cibernética.
Que disfruten con su lectura.

Sobrecarga de esparto

martes, 22 de mayo de 2012

La bufalaga



La Bufalaga o Thymelaea tinctoria es una especie de planta leñosa perteneciente a la familia Thymelaeaceae.

Se la describe afirmando que es una mata ramosa, con tallos desnudos de hojas hacia su parte basal y cubierto, como las hojas, de una pilosidad suave con tacto como de terciopelo.

Al parecer esta variedad de las timeáceas es nativa de la región mediterránea occidental y, en España, se distribuye por Alicante,CastellónGeronaLéridaTarragona y Valencia donde  vive en matorrales sobre sustratos básicos secos de naturaleza caliza.


Se conoce infinidad de variedades de timeáceas, cada una con sus diferentes nombres en castellano, tales como brufalaga, bufalaga, bufaralda, matapollo, mierdacruz, mierda cruz, mierda-cruz, salamonda, yerba de Montserrat o yesca fría. 

De esta planta dicen los entendidos que toda ella, por su contenido en resinas, es un purgante drástico que puede ser venenoso incluso a dosis débiles.

Basándose en esa propiedad, Fernando Palop nos narra un contet muy extendido en toda La Sierra. Bien que no dudará en poner nombre a los actores, a quienes la imaginería popular les irá añadiendo apellidos.

Con todo, a nuestro entender, lo verdaderamente importante de la narración es la descripción de la vida de aquellos años: la tartana del Sacristán, el coche de tiro animal del Castellano, el Hispano - Suiza de Tomás Granero, las vigas de movila, etc., etc.; detalles todos que hacen que el lector se sienta espectador privilegiado de aquella época.

Con la ilusión de que dsifruten con su lectura hemos preparado el Documento




martes, 15 de mayo de 2012

La República Enguerina



Esta semana les ofrecemos un nuevo sainete en parla enguerina. Su autor se inspiró en un mensaje electrónico aparecido hace un par de años en una página web de ámbito local. Dada la curiosidad de la noticia, pronto se le dispararon las neuronas y de la sorpresa a la curiosidad del literato que, lógicamente, la aprovechó para desarrollarla en clave de humor, intentando convertir aquella noticia en sátira política acorde con los tiempos actuales.

Nos dice su autor, de quien ya llevamos publicadas varias obras en este blog (Las Muletas de San Antón, el 8 de febrero; Aquí tenemos de too, el 21 de septiembre; Hamos hecho las paces, el 27 de diciembre del 2.011; y ya en este año: El Asilo, 20 de marzo), decimos que nos dice el autor que:
 “cualquier parecido con la realidad no es ( o sí es ) pura coincidencia y, ¿tal vez  por ello?,  no se pudo airear en un verano cultural”.


Hoy se la mostramos a ustedes deseando que el humor corrosivo que destila no les salpique..., humor, damos fé, totalmente ajeno al que suele prodigar su autor.

Que la disfruten

martes, 8 de mayo de 2012

Palabras enguerinas XVII


La Parla Enguerina, tal como nosotros la hemos heredado, es una forma de hablar –y también de escribir- que ha precisado siglos de creación. Es como un edificio noble –un monumento- que ha sido levantado –construido- poco a poco a lo largo de  mucho tiempo. En él podemos observar las poderosas herencias de romanos y árabes, de aragoneses, catalanes y castellanos. Pero también, en ese conjunto de palabras enguerinas, encontramos constantes muestras de la capacidad inventiva de los hombres y mujeres que nos precedieron. Capacidad de inventar y de crear palabras nuevas, de imaginar las frases, dichos y charrás que nos identifican. Pero también capacidad, como veremos enseguida, de transformar y adaptar a nuestra forma de ser una serie de palabras recibidas del castellano o del catalán valenciano hasta darles el sentido que nos interesa. Esa misma capacidad de nuestros paisanos ha existido –y aún existe- si hablamos de la afición a escribir romances, sainetes, cuentos y demás formas literarias que han hecho de esa Parla una lengua propia. En pocas poblaciones de tamaño similar a Enguera encontraremos un conjunto de hombres y mujeres que, a lo largo de los dos últimos siglos, hayan dejado una abundancia similar, una riqueza tal de textos escritos en la forma de hablar propia como ocurre entre nosotros con la Parla Enguerina.


Vista aérea de las ruinas del Castillo de la Encomienda

Por eso, hemos de insistir en la importancia de conservar esta herencia recibida, de mantenerla viva en nuestro hablar diario, cosa que aún hacen muchos enguerinos. Pero también en la necesidad de arreplegar, estudiar, guardar y difundir cuantos materiales de todo tipo contengan algún aspecto de nuestra Parla Enguerina. En esa tarea estamos empeñados algunos. Pero somos conscientes de que todos podemos colaborar, cada uno a su medida, a su manera.
Matías Aparicio

martes, 1 de mayo de 2012

Fiesta de Santa Cruz

Próxima la Fiesta de la Santa Cruz la Redacción del Blog quiere hacer su pequeño homenaje a esta fiesta tan entrañable y antigua en nuestro pueblo. No en vano la principal vía de acceso a la población cristiana era por esta calle, como en la actualidad lo es por la Avenida España.
Nuestro homenaje se une al que tributará esta misma semana nuestra homónima Enguera en la palabra. Entrambas dos queremos mostrar un florilegio de fotos y documentos escritos relativos a la calle y la devoción.
 Cruz de la calle

En efecto, si comenzamos por las fotos, en estos números hemos pretendido realizar una pequeña y sentida recopilación de imágenes e instantáneas relativas a la tradición multisecular que en nuestro pueblo se fueron prodigando a la Santísima Cruz.
Por ello queremos que puedan disfrutar de las vistas de dos de las antiguas cruces de término, a saber: la actual Cruz de la calle –en dos momentos diferentes– y la Cruz de Piedra (la actual y el antiguo pilón, en la Oliveta); de las otras dos cruces de términos no hemos podido recoger vestigios.
Igualmente, hemos tomados dos instantáneas significativas: la primera hace referencia a la Cruz del Piquet vista desde la Plaza; la segunda es una preciosa reliquia que nos suministró Santiago Sánchez, se trata de una cruz grabada en una losa en el antiguo camino a Los Paraillos.
Antiguo Pilón de la Cruz, en la Oliveta

Y en relación a nuestra literatura recogemos, en ambos blogs, desde la poesía a La Cruz del Piquet, de Manuel Albiñana, hasta la compilación que el Grupo Artístico Enguera hizo de la comedia que titularon Sainete de Santa Cruz, montaje sobre la obra que nuestro clásico Juan Bautista Sanchis escribiera bajo el título de La Fiesta de Santa Cruz (ya publicada por estas mismas fechas del año pasado).

Cruz del Piquet desde la Plaza

A ello hemos querido completar el trabajo trayendo las escenas de El niño Pincel, La cazuela de arroz y Los avíos de las danzas, con las que nuestros alizonencos Pepe Ciges y Emilio Granero enriquecieron la obra del maestro Sanchis.

Con la publicación de todos estos Documentos queremos, por una parte, unirnos a los vecinos de la calle del Llano y, por otra, retomar la fuerte tradición que, curiosamente, no la hemos encontrado enmarcada con la Orden de Santiago, al menos en la simbología.

Picar para acceder al Sainete de Santa Cruz